Audi cumple este otoño 25 años de haber creado el motor TDI y lo celebra con la incorporación de un biturbo eléctrico, un compresor eléctrico que mejora el rendimiento de energía del motor.
El primer motor TDI, o Turbocharged Direct Injection, se presentó en la carrocería de un Audi 100 en 1989 en el Salón del Automóvil en Frankfurt Alemania; este tipo de motor es un turbodiésel con inyección directa y regulación completamente electrónica.
Desde su nacimiento, la tecnología de inyección directa de combustible ha hecho que el motor diésel se convierta en uno de los grandes éxitos en el mercado automovilístico mundial, revolucionando los motores convencionales.
Es así que a lo largo de estos 25 años, Audi ha vendido más de 7,5 millones de automóviles equipados con motores TDI, tan sólo en 2013 vendió casi 600 mil unidades. Este año la compañía alemana celebra con su nueva tecnología biturbo, un compreso eléctrico adicional que permite establecer rápidamente la presión de sobrealimentación y mejorar el rendimiento del motor, evitando la pérdida de energía.
Este nuevo motor TDI se construyó para dos modelos: el Audi A6 TDI concept con un único turbocompresor y el Audi RS 5 TDI concept con doble turbocompresor; ambos modelos incluyen el biturbo eléctrico y han impresionado por su despliegue de potencia.