De acuerdo a un comunicado publicado hace algunos minutos, Apple Inc. pedirá a la juez federal a cargo del caso de los ataques de San Bernardino que la disputa con el Buro Federal de Investigaciones sea estudiada y discutida por los miembros del Congreso de los Estados Unidos, y no por un tribunal.
Tim Cook y su compañía también alegarán esta semana que al coartar a Apple a decodificar el iPhone usado por los atacantes, el FBI y las instituciones del estado están rompiendo una de las leyes que rigen las libertades de los ciudadanos estadounidenses que se encuentra citada en un documento altamente reconocido que data de 1789.
Theodore J. Boutrous Jr., uno de los abogados que Apple ha designado para este complicado caso, fue quién ha estado a cargo de estos adelantos en cuanto a las posibles vías que la compañía fundada por Steve Jobs pudiera tomar. Tim Cook, CEO de la misma, también ha hecho alusión a las estrategias judiciales que la compañía ha considerado en sus comentarios escritos recientes posteados en los medios de prensa oficiales de la compañía. Debemos recordar que Tim Cook es uno de los principales precursores luchando para que la privacidad sea considerada como uno de los derechos fundamentales de todo ser humano.
«El gobierno realmente busca presionar a que las cortes hagan lo que no han podido convencer al Congreso a que haga», dijo Boutrous durante la entrevista los medios. «Eso significa darle una mayor autoridad con el fin de ayudar al Departamento de Justicia para intervenir dispositivos y así tener una puerta trasera para ingresar a los dispositivos, y la ley simplemente no otorga esa autoridad.»
Por su parte, representantes del Congreso y de la Casa Blanca han comenzado a dar sus valoraciones en cuanto a esta posible acción de Apple. El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, descartó esta semana que el Congreso deba ser quien decida el tema y dijo que la solicitud del gobierno era limitada. Earnest indicó que la juez «falló a favor de nuestras agencias de la ley» luego de evaluar argumentos de Apple y el FBI.
Sin duda alguna, y como John McAfee dijo la semana pasada, estamos ante uno de los casos más importante en el mundo de la tecnología en los últimos tiempos. Gran parte de la seguridad digital dependen de las acciones que Apple decida tomar, junto con la presión que el Gobierno Federal esta ejerciendo. El debate ha dividido a muchos, y quizás estemos muy lejos de llegar a una solución satisfactoria para ambos bandos.