El Sexting, nombre dado a la práctica de enviar y recibir vídeos o imágenes sexuales a través del móvil, ocupa posiciones entre la población juvenil del Reino Unido. Peter Wanless, director de la NSPCC, dijo: “es de lo más habitual que los jóvenes que mantienen una relación de pareja compartan imágenes explícitas de ellos mismos”.
Es muy llamativo como los jóvenes manejan la sexualidad online, sin demasiados tapujos y sin que los padres puedan hacer gran cosa para controlar la situación. Facebook elimina las restricciones para los menores de edad exponiéndolos a pedófilos y trata de personas, mientras que Amazon lanza una tableta familiar para que los padres puedan vigilar y dirigir la navegación de sus hijos.
Los jóvenes británicos muestran su indignación ante el tiempo y recursos que el Estado destina a hacer seguimiento a esta práctica: muchos argumentan que se trata de una forma de comunicación que está de moda y que no hacen daño a nadie, pero según los resultados entregados por las encuestas realizadas más del 40% de los encuestados han practicado el sexting con su pareja, algunos con personas poco conocidas a través de Internet y un 15% con extraños.
El Gobierno, alarmado por la situación, planea incluir en la educación estos temas tan delicados para que sean de algún modo controlados ya que muchos jóvenes carecen de una guía apropiado que los dirija desde temprana edad. Tal vez el poco uso y entendimiento de las redes sociales por parte de los padres hace que le sea mucho más difícil actuar de manera oportuna.