Pese a que en un principio los AirPods se vieron afectados por el escepticismo de las grandes mayorías, el paso del tiempo los ha colocado en un lugar privilegiado. Y es que son muchas las características que hacen que estos diminutos auriculares inalámbricos sobresalgan en el mercado de los dispositivos Bluetooth. Sin embargo, una característica los distingue por excelencia, y aquí te la explicamos.
César Salza, un reconocido blogger de tecnología español declara que los AirPods se distinguen por su fácil conectividad. «Si has usado auriculares de conexión Bluetooth, debes saber que no son exactamente amigables para conectarlos y desconectarlos de un dispositivo a otro. Si usas los AirPods con tu iPhone, Mac y iPad, no tendrás ningún problema, debido a que gracias a la tecnología incorporada en el chip W1 que utilizan los auriculares, es muy fácil conectarlos a cualquiera de los equipos.»
Esto es algo en lo que todos los usuarios están de acuerdo. La fácil conectividad hace que los audífonos sean útiles en cualquier momento, sin necesidad de estar conectándolos o desconectándolos de un dispositivo a otro. Cualquier usuario de Apple trabajará desde una MacBook, saldrá a caminar o a hacer ejercicio al gimnasio usando un Apple Watch, y usará un smartphone de la compañía, lo que hace que esa «conectividad» se vuelva algo esencial.
Sí, es cierto, hace poco más de un año, cuando Apple lanzó los AirPods, todos pensamos que serían un fracaso. Los audífonos inalámbricos suscitaron toda clase de polémicas, comentarios y hasta chistes: «se te van a caer cuando corras, los vas a perder, son feos y pareces un alienígena, la calidad de audio será mala,» etc. Pero eso ha quedado en el pasado. Los números muestran que los AirPods se han vendido como pan caliente, al punto que se han agotado y su existencia se habilitará hasta el próximo año.