Por no incluir en sus aplicaciones en web y en dispositivos móviles sistemas de seguridad que impidan que los niños compren cosas sin autorización de sus padres, la empresa de comercio electrónico, Amazon, fue demandada por la Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos.
El principal peligro para las carteras de los padres se encuentra en las aplicaciones descargadas en equipos como las Kindle Fire, donde los niños habrían gastado millones de dólares cargados a la factura de Amazon.
Según el comunicado emitido por la FTC, Amazon obtiene 30% de las ganancias obtenidas por los cargos dentro de aplicaciones, por lo que el alegato de la Comisión Federal de Comercio buscaría que Amazon reembolse dinero a los afectados. “Aunque los propios empleados de Amazon han reconocido los serios problemas que sus procesos han creado, lo que ahora tratamos de lograr son reembolsos para los padres afectados”, señaló la presidenta de la FTC, Edith Ramírez.
Además, la demanda gubernamental exige que Amazon incluya en aplicaciones y en web sistemas de seguridad para que los niños no puedan hacer ninguna compra sin el consentimiento de los padres, para evitar casos como el de una madre de familia que asegura que su hija gastó más de $350 dólares en cargos no autorizados por ella. “Los niños que no saben leer pueden presionar muchos botones al azar e incurrir en cargos”, se lee en el documento.