A mediados de 2016 Lenovo presentó oficialmente al Moto Z, su nuevo buque insignia con el que la compañía quiso tomar el riesgo de apostarle a un sistema modular. Con estas tecnologías, es posible convertir nuestro teléfono móvil en un parlante, en un proyector o incluso en una cámara profesional en segundos y sin complicaciones.
En HoyEnTec tuvimos la oportunidad de probar el Moto Z por varios meses y pudimos concluir que se trata de un teléfono muy interesante, que puede competir con cualquier dispositivo gama alta actual. Veamos más a fondo sus especificaciones, beneficios y aspectos por mejorar.
Diseño
Lo que más impacta del Moto Z desde el momento en que lo sacamos de la caja es su peso de 136 gramos y su delgadez, pues tiene solo 5mm de espesor. De igual manera, después de varias semanas de uso nos dimos cuenta que sus materiales son resistentes, pues el teléfono no se raya con facilidad y ante una eventual caída, no vamos a tener un hecho que lamentar, pues es un equipo bastante sólido.
La parte frontal del smartphone la ocupa una pantalla AMOLED de 5.5 pulgadas, una cámara frontal de 5 megapíxeles con flash LED, y el altavoz superior. Al frente también tenemos el lector de huellas que funciona bastante bien, pero que solo cumple la función de bloquear el dispositivo, así que no podemos usarlo como botón de ‘home’ ni para encender o apagar el celular. Cuando lo utilizamos notamos que la identificación es inmediata.
Al respaldo tenemos su cámara principal de 13 megapíxeles que sobresale del diseño del dispositivo, y los conectores de los Mods de Motorola. Es importante destacar que debido al material de metal, al poco grosor y a las curvaturas, el Moto Z no es un teléfono que se deslice de las manos.
En la parte inferior del teléfono nos encontramos con el conector USB C, que no solo conecta el teléfono al cargador, sino que también funciona para que conectemos los audífonos. Dentro de la caja del Moto Z encontramos el cable convertidor para poder usar cualquier tipo de audífonos con el celular.
Cámaras
Lenovo equipó al Moto Z con una cámara de 13 megapíxeles, con apertura f1.8, flash LED doble, enfoque láser, tamaño de pixel de 1,12 µm y estabilización óptica. Aunque todo suena bastante bien hasta este punto, es importante decir que la cámara es buena en ambientes de mucha luz, pero el zoom es bastante regular, pues las imágenes se ven pixeladas y pierden calidad.
Lo mismo ocurre en las noches. El sensor no tiene buen comportamiento en ambientes de poca luz, pues muchos elementos dentro de la imagen quedan descontrolados, su procesado no es el mejor, hay mucho ruido y se pierde bastante información.
En cuanto a la cámara frontal, podemos decir que su desempeño es bueno, pues el sensor de cinco megapíxeles es una buena opción para selfies o hacer videollamadas sin problema. Si estamos en un ambiente oscuro y queremos tomar una foto con esta cámara, podemos valernos del flash LED para obtener un mejor resultado.
Especificaciones y autonomía
El Moto Z es el smartphone más poderoso de la nueva línea de Lenovo, pues cuenta con Android 6.0.1 de fábrica, un procesador Qualcomm Snapdragon 820 con GPU Adreno 530 y memoria RAM de 4GB, dos especificaciones que se complementan para ofrecernos una experiencia fluida, por lo que podemos hacer multitarea sin problema. De igual manera, el Moto Z viene con 64GB de capacidad de almacenamiento, y tiene una ranura para expandirlo hasta con 256GB.
Por el lado de la batería el teléfono si queda algo corto, pues si no tenemos el Moto Mod Incipio Power Pack con nosotros, realmente los 2600 mAh no garantizarán todo un día completo sin cargar el teléfono. Si tenemos el Mod de batería con nosotros, es posible extender la autonomía del equipo hasta por 22 horas. En mi caso, cuando veía que el teléfono tenía menos del 15% de batería, instalaba el Mod para que se cargara rápidamente sin tener que estar conectado a un toma corriente.
Si por circunstancias ajenas a nosotros el teléfono y el Mod se descargan en una hora inapropiada del día, podemos cargar el 50% de la batería en un poco más de 15 minutos, pues el Moto Z incluye un cargador de carga rápida.
Moto Mods: todo un éxito
El Moto Z viene equipado con el Mod Incipio Power Pack, el JBL SoundBoost y un Style Shells. Los mods Hesselblad True Zoom y el Insta-Share Projector, se pueden adquirir por separado. A continuación haré una rápida descripción de cada uno de ellos.
- Mod Insta-Share Projector: La idea de este mod es permitirnos convertir el Moto Z o en un proyector que despliega una pantalla de 70 pulgadas. El Insta-Share Projector tiene una batería interna que permite usarlo durante 1 hora sin perjudicar la autonomía del teléfono.Lo único que tenemos que hacer es conectar el mod al teléfono y ubicar una superficie plana para poder proyectar películas, fotos, galerías o todo lo que esté en nuestro dispositivo móvil.
- Mod Incipio Power Pack: Con este mod podemos aumentar la vida de la batería del Moto Z en segundos. Lenovo asegura que los usuarios con este módulo pueden extender la duración de su batería hasta 22 horas, gracias a su capacidad de 2.220mAh.
- Mod JBL SoundBoost: Lenovo se alió con JBL para crear un mod capaz de convertir nuestro smartphone en un altavoz. Además de ofrecernos un mayor volumen y alcance, con este accesorio también podremos tener una mejor calidad de sonido. La batería de este mod es de 1000 mAh, por lo que nos ofrece una autonomía de hasta 10 horas.
- Mod Hesselblad True Zoom: Con este mod se pueden mejorar las capacidades de la cámara de forma considerable. Por ejemplo, este mod nos permite tener un zoom óptico 10x y capturar en formato RAW. El sensor del módulo tiene una resolución de 12 megapixeles con apertura focal que va desde 3.5 hasta 6.5.
- Mod Style Shells: Lenovo incluyó a sus carcazas intercambiables dentro del grupo de los Mods debido a que ahora se adhieren al teléfono tan fácil como si fueran otro Moto Mod. Las texturas disponibles son las que ha manejado la línea en otros teléfonos del pasado, destacando materiales como el cuero o el nylon balístico.
Conclusión
El Moto Z es el ejemplo perfecto de que un sistema modular bien desarrollado puede ser todo un éxito. Los módulos de batería, el proyector o el de música nos ayudan a que nuestro teléfono sirva para algo más que hacer llamadas o publicar en nuestras redes sociales. Además, su diseño delgado, su sistema de identificación de huella dactilar y su resolución de pantalla, hacen que valga la pena tener un teléfono como este y olvidar algunas de sus desventajas, como lo son la cámara, la autonomía (que se soluciona con el Mod) y la ausencia del puerto jack para audífonos.
Calificación: 4,5 sobre 5.