China es uno de los mercados más importantes consumidores de videojuegos, por lo que, establecer las normas necesarias para su consumo adecuado es uno de los nuevos objetivos. La restricción de las horas en las que los menores de edad podrán acceder a este tipo de entretenimiento ya es un hecho.
Se trata de una medida establecida por el gobierno, lo que podría generar un impacto gradual en las principales compañías desarrolladoras. Se espera que, con este movimiento, se reduzcan los riesgos de adicción a los videojuegos, lo que se conseguiría con la limitación de tiempo y dinero que los usuarios pueden invertir en esta finalidad.
Según el comunicado oficial, los jugadores solo podrán acceder a los juegos móviles entre las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche. En este periodo de tiempo, los usuarios no podrán permanecer conectados durante más de 1 hora y media, lo que va a generar mucho revuelo en el público chino.
Es evidente que cada vez es mucho más masivo el consumo de videojuegos en Asia, y la falta de control sobre esta situación puede generar daños irreversibles en el niño. El gobierno ha tomado medidas finalmente con el objetivo de proteger la integridad y la salud de los más pequeños.
Durante décadas, desde su invención, los videojuegos han sido un método de entretenimiento muy criticado por algunas organizaciones de protección al menor. En su momento, se acusaba a estos de generar ataques epilépticos en los niños, algo que ahora se ha transformado parcialmente en problemas de ludopatía.
La medida ha entrado en vigencia, y los niños tendrán que someterse a este nuevo esquema, el cual está pensado para controlar el comportamiento de los menores ante el uso excesivo de juegos de vídeo. Se ha elaborado un registro nacional que puede calificar a los registrados por categorías y edad, pero durante los días festivos, se extiende el permiso a 3 horas.