Sandra Casillas, una ingeniera mexicana del Instituto Tecnológico de la Laguna (ITL), desarrolló un conjunto de celdas fotoeléctricas transparentes que podrían ser usadas como paneles solares en el hogar. Las innovadoras celdas podrían ser fácilmente sustituir el vidrio como material de construcción, y ser así utilizadas como ventanas o puertas en las casas o edificios. Se estima que las celdas son capaces de almacenar hasta ocho vatios de energía por cada metro cuadrado, energía suficiente para muchos tipos de aparatos eléctricos de uso común.
La ingeniera afirmó que el prototipo esta basado en tecnología similar a la que se usa para empacar comida. El panel solar transparente consta de tres capas diferentes. Combinando materiales como cobre y zinc en una de las capas, y el selenio y telurio en otra, la conducción de la energía se hace más fácil ya que el material adquiere características de conducción de los metales. “Usamos esa tecnología en la celda para generar un polímero transparente con varias capas y que a través de ellas se produjera electricidad,” dijo Casillas.
Casillas también afirmó que los beneficios de su invento son casi instantáneos y que su costo es mucho menor al de los paneles solares usados en Europa. El costo por metro cuadrado de este material ronda alrededor de 350 pesos mexicanos, es decir un poco menos de los 23 dólares estadounidenses. el invento ha dado mucho de que hablar y los beneficios que podría traer a México y al mundo son invaluables por el momento. México es uno de los países con mayor potencial para hacer uso de este tipo de energía, ya que en promedio recibe una radiación solar de 5 kilowatts hora por metro cuadrado (kwh/m2). Esto lo convierte en uno de los tres países que recibe más energía solar de manera directa, quedando solo atrás de China, y Singapur, y por encima de Australia e India en el top five.