Recientemente el Wall Street Journal reportó que hace aproximadamente un año Tim Cook aprobó un proyecto para fabricar y diseñar un automóvil eléctrico bajo la marca de Apple. Un equipo de cerca de 1.000 personas estaría trabajando en el vehículo que entraría al mercado a competir directamente con Tesla, una de las firmas más importantes de carros eléctricos de gama alta.
Aunque por años se habló de esta posibilidad, e incluso el mismo Steve Jobs hizo referencia en varias oportunidades a su visión de los carros del futuro, hasta la fecha no se había concretado el proyecto por parte de la compañía de la manzana, hasta la llegada de los más recientes rumores.
Además del Journal, fuentes como Reuters también indicaron que Apple está trabajando en Titan, nombre que recibe la iniciativa, y que para ello se ha contactado con expertos fabricantes y proveedores de automóviles.
Las posiciones frente a este importante rumor son muchas, sin embargo a continuación compartimos cinco razones por las que consideramos que es una buena idea contar con un vehículo de Apple en el mercado.
1. Más opciones de autos eléctricos en el mercado
Muchos fabricantes de automóviles están trabajando en lanzar sus propios vehículos eléctricos y la llegada de uno más al mercado no estaría nada mal. De hecho, la adopción de carros eléctricos reduciría en cierta medida la emisión de gases nocivos para el ambiente, por lo que entre más compañías fabriquen vehículos con estas características, posiblemente más personas se animen a comprar uno para hacer una buena acción por el planeta.
Además, es bueno tener en cuenta que cuando Apple ingresa a un mercado nuevo no lo hace con un producto cualquiera. Un claro ejemplo de esto es cuando la compañía entró a competir en la industria de los teléfonos móviles con el iPhone, un smartphone equipado con iOS, un sistema operativo novedoso y diferente. Ahora al entrar al sector de los automóviles, seguro traerá una propuesta algo diferente a lo que estamos acostumbrados a ver.
2. Un automóvil 100% conectado
Estar conectado en cualquier lugar y en todo momento se ha convertido en una necesidad para muchos. Si Apple lanzara su propio vehículo, este ofrecería diferentes alternativas para que las personas se conectaran en todo momento. Para especular un poco, se podría pensar que el automóvil estaría relacionado con el asistente de voz Siri, tendría integradas aplicaciones como Google Maps y ser controlado casi por completo con ayuda del dispositivo móvil.
3. Un vehículo autónomo
Entre más tecnológico sea un vehículo, puede llegar a ser más autónomo y fácil de conducir. Al tratarse de una compañía del tamaño de Apple, lo más posible es que el automóvil venda equipado con la tecnología y seguridad suficientes para que éste pueda brindarle a los usuarios información exacta y detallada sobre el trayecto, el estado del tránsito o las condiciones de las vías. «Se trata de un juego de software. Todo es sobre la conducción autónoma», dijo una fuente cercana a la compañía de la manzana a Reuters.
4. El sueño de Steve Jobs
Muchos recordarán que Jobs hizo referencia en varias oportunidades a su anhelo de construir un iCar. Pues bien, si Apple está trabajando en este proyecto es posible que hayan tenido en cuenta algunas de las cualidades que el fundador de la compañía tenía en mente para los carros del futuro.
Recordemos que para Jobs consideraba que un auto inteligente era el que al conductor solo le tocaba dirigir el volante, pues la tecnología que incorpora le permite acelerar y frenar solo según las necesidades, parquearse por sí mismo, e incluso, detenerse solo cuando detecta tráfico a su alrededor.
Equipado con cámaras y sensores, el carro debe ser tan automático que incluso avise antes de llegar a un hueco o un obstáculo para que el conductor se desvíe sin peligro, ya que además, claramente, debe contar con sistemas de aviso de cambio de carril.
Por el momento solo se trata de un rumor que no ha sido confirmado ni desmentido por la compañía de la manzana, así que solo queda esperar a que sea una realidad y que supere todas las expectativas.