General Motors acaba de dar un paso adelante en la carrera por el desarrollo de coches autónomos con la adquisición de Cruise Automation, una compañía dedicada a los vehículos autónomos con sede en San Francisco, que ya ha estado probando su tecnología en las calles de aquella ciudad.
A pesar de que el importe de esta transacción no ha sido divulgado, un reporte de Fortune estima que se trata de una inversión con un valor de alrededor de mil millones de dólares. Esta adquisición, junto con otras inversiones e investigaciones propias de GM, ayudará a impulsar al gigante de Detroit en su competencia con Google y otros desarrolladores de vehículos autónomos.
«Los vehículos totalmente autónomos van a brindar a nuestros clientes muchas ventajas, especialmente en términos de reducción de costos y mejora de la seguridad en la movilidad cotidiana», asegura en un comunicado de prensa, Dan Ammann, presidente de GM.
Cruise Automation Inc., fundada en el 2013 es una de las pocas compañías que junto con Google cuenta con permisos para probar los coches autónomos en las calles del estado de California. De acuerdo con Kyle Vogt, fundador y director ejecutivo de la firma, Cruise Automation está trabajando para resolver los principales obstáculos a los que se enfrentan los vehículos autónomos, como distinguir carriles en malas condiciones de tiempo, e integrar datos de cámaras y otros sensores para que los coches tomen las decisiones más acertadas.
Aunque GM aún no ha dado a conocer cuándo comenzará a implementar esta tecnología, Ammann asegura que eso sucedería en cuanto la compañía pueda demostrar que los coches están listos. «Nuestra posición es que la tecnología autónoma va a ser demostrablemente más segura que el conductor humano» añade.
Al igual que otras firmas como Chevrolet, Buick, Cadillac, y Vauxhall, GM es uno de los fabricantes más grandes y antiguos de automóviles, formando parte de un mercado que actualmente se ha visto invadido por nuevos competidores tecnológicos, como Apple, Google y Uber. De ahí que los esfuerzos del tercer grupo automotriz mundial busquen anticipar los cambios en la relación de los consumidores con los automóviles en un futuro próximo. ¿Logrará GM afianzar su posición?