Un grupo de científicos relaciona el tiempo que pasamos con nuestros smartphones a nuestro intelecto.
Una reciente investigación, publicada por la revista estadounidense The Lancet, afirma que los pequeños que pasan más de dos horas al día al frente de una pantalla de un teléfono inteligente o una tableta tienen pésimas capacidades cognitivas. La investigación aumenta las inquietudes entre los expertos sobre la influencia de estos terminales en la eficacia cognoscitiva de los humanos.
El estudio recopila el análisis de las actividades cotidianas de más de 4 mil 500 niños estadounidenses entre los 8 y 11 años de edad. Los pequeños que pasaron más de dos horas al día (cantidad recomendada por la Academia de Pediatría Estadounidense) con los ojos pegados a la pantalla de un teléfono o una tableta indicaron un escaso desempeño en tests de memoria, lenguaje y razonamiento que los niños que pasaban hasta dos horas o menos con uno de esos terminales.
De acuerdo con lo que dijo a Science News, el coautor del estudio y fisiólogo Jeremy Walsh, asevera que los resultados del análisis son alarmantes. El estudio de su grupo demostró que solo el 5 % de los niños realizó todas las recomendaciones sobre actividades cotidianas que, aparte de dos horas diarias como tope con un teléfono inteligente, contenía también una hora de actividades físicas y estimaban entre 9 y 11 horas de sueño.
Solo el 29 % de los niños de la investigación no hizo ninguno de los patrones. Esto significa que “tienen menos de 9 horas de sueño, pasan más de dos horas pegados a la pantalla y no hacen ninguna actividad física”.
De media, los niños que participaron en la investigación pasaban 3,6 horas al día usando los terminales para jugar videojuegos, ver videos y otro tipo de entretenimiento.
Estos resultados son “una razón para preocuparse”, asegura Walsh. De acuerdo con el experto, la investigación de su grupo aclara que “el límite de dos horas parecer ser una buena alternativa para favorecer las habilidades cognitivas”.