Tal y como avanzan desde Bloomberg, el presidente de Serbia, Aleksandar Vučić, le acaba de entregar la nacionalidad balcánica a Stephan Gary Wozniak, Woz para los amigos, confundador de Apple. «Ahora podemos decir con orgullo que un genio de la informática es un serbio», ha comentado el presidente a los medios en un momento de extrema tensión social, ya que Serbia adelantará sus elecciones parlamentarias tras meses de protestas. De hecho, la primera ministra Ana Brnabic puntualizó que esta acción es una de tantas que el Estado está promoviendo en materia de educación tecnológica.
Steve Wozniak, de ascendencia ucraniana y polaca, confirma así que su estado de salud es mucho mejor y ya se ha recuperado del ictus que sufrió mientras asistía al Foro Mundial de Negocios en Santa Fe, México. En aquel momento, al parecer, su esposa dijo que no se encontraba bien, que estaba «de forma extraña», aunque Wozniak renegó de recibir atención médica. Poco después, fue ella misma, Janet Hill, quién acabó llamando a una ambulancia, tras el desmayo de su esposo. Tras el traslado al hospital Centro Médico ABC Santa Fe se confirmó que había sufrido «un evento vascular cerebral isquémico». Ya está, en cualquier caso, fuera de todo peligro.
Quién es el Steve Wozniak tras el relato que todos conocemos
Wozniak siempre se ha mostrado entre distante y descreído. Pero su aparente cinismo reside en una visión muy noble pero crítica con la industria informática. Es de sobra conocida su perspectiva crítica y analítica sobre las inteligencias artificiales y empresas como Meta, desmitificando el nacimiento de Apple o los logros maravillosos de Steve Jobs, quien se atribuyó más méritos de los que le correspondía.
Para muestra, tres botones: Wozniak, por ejemplo, se encargó del prototipo de Breakout que Atari le encargó a Jobs, tras varias noches sin dormir y sin llevarse ni un dólar de la prima de 5.000 dólares que el fundador de Atari, Nolan Bushnell, le prometió a Jobs en privado. También fue el responsable de hacer realidad la imposibilidad del Apple I y le consiguió trabajo a Jobs en Hewlett-Packard, un enlace fundamental para sus futuros contactos.
Sin embargo, Steve Wozniak ni siquiera quería ser informático. De hecho, lo fue por imposición tácita, porque era lo lógico. Un niño criado en Cupertino, hijo de un prestigioso ingeniero de Lockheed Corporation, no podía ser otra cosa. Una vez se graduó en la Homestead High School en 1968, en la primavera del 70 ya había diseñado la famosa caja azul que le valió el apodo de ‘Berkeley Blue’. Una especie de caja azul que aparece hasta en Los Simpsons y no es otra cosa que una herramienta de pirateo telefónico que hackeaba la línea para llamar gratis.
El amor secreto de Steve Wozniak
Steve Wozniak ama la música por parte de su madre. Él nunca lo quiso reconocer, pero es un guitarrista consumado, solo que nunca se ha prodigado o se ha atrevido a decirlo a las claras. «En la universidad tomé un par de libros de canciones y comencé a aprender guitarra de oído», relató en una entrevista. «Me convertí en un fan de ciertas guitarras sobre otras, pero no estoy tocando bien en este momento. Voy a muchos conciertos, pero no a los grandes espectáculos sobre-producidos. Voy a lugares más pequeños en San Francisco. Mi esposa y yo asistimos a unos 50 conciertos al año y, por lo general, observo cómo están escogiendo la guitarra, cómo obtienen el sonido».
Un freak, también. Uno que diría hace apenas un par de años «La música es una parte enorme de mi vida. Desempeña un papel integral en la creación de la persona completa». De hecho, en su pasión por la guitarra se hizo buen amigo de Steve Capps, el co-diseñador de Macintosh Finder, creador de la Jaminator, una guitarra digital que inventó él mismo y que le permitía tocar mientras trabajaba con el software Newton. Puedes verlo en la siguiente foto:
Así bien, ya solo falta ver a este nuevo Woz serbio como a su nuevo compañero de patria, el guitarrista Goran Bregovic. ¿Quizá colaboren en algún evento cultural? Como fuera, Wozniak ha pasado a formar parte de esa gran plantilla de ilustres del país como pueden ser Novak Djokovic o Nikola Tesla. Y que sea así por muchos años más.