La ciencia continúa desarrollando diferentes métodos para ayudar a las personas. Sin embargo las mascotas son una parte importante de nuestra vida y muchas de ellas no disfrutaban de sus ventajas. Todos los días se colocan miles de prótesis a lo largo del mundo y el protagonista de estos días ha sido un pequeño felino. El gato Vincent de tres años ha vuelto a caminar gracias a una prótesis creada con una impresora 3D.
Hace unos meses se conoció el caso de Abbi, una niña que consiguió una prótesis de mano del mismo modo. También son muchas las mascotas que pierden alguna de sus patas y podrían ser felices al contar con una prótesis, y el gato Vincent lo ha demostrado. ¿Pero cómo ha sido la intervención y quién la ha llevado a cabo?
La doctora Sarah Bergh, perteneciente a la Universidad de Iowa, se encontró un día allí a Vincent. Comprobó que había perdido sus dos patas traseras a la altura de la tibia y en ese momento decidió que quería ayudarle a volver a caminar. Así comenzó el proceso que ha dado lugar a esta noticia y el resultado ha sido satisfactorio.
Junto a la compañía BioMedtrix, especialista desde 1989 en crear prótesis y accesorios para mascotas, ha creado las patas de titanio que ahora luce Vincent. Implantadas directamente en el hueso, de momento se encuentra en las primeras fases de se rehabilitación. A lo largo de esta el pequeño «aprenderá» a caminar con ellas y mientras tanto los responsables crearán accesorios que consigan adaptar la prótesis hasta una longitud normal para sus patas.
Aún les queda camino por recorrer, pero sin duda es un gran comienzo. Vincent ya puede caminar y disfrutar de la independencia que hasta ahora se le había privado. Habrá que permanecer atentos a su evolución y a la de otros «amigos peludos» que podrían llegar a encontrarse en su misma situación. ¡Enhorabuena Vincent!
