Por medio de un gen implantado en cerdos con un padecimiento cardíaco, un grupo de científicos del Instituto Cedars-Sinai de Los Ángeles logró convertir células dañadas del corazón en otras que sirvieran de marcapasos natural a fin de recuperar el ritmo cardíaco.
Se trata de una “terapia génica” que cambia la naturaleza de las células para convertirlas en otras y de esta forma “tratar una enfermedad”, informó el director del Instituto Cedars-Sinai, Eduardo Marbán.
Los investigadores inyectaron en el corazón de los cerdos enfermos un gen dentro de un virus inocuo. Cuando las células enfermas recibieron el gen, cambiaron su comportamiento y comenzaron a emitir los impulsos eléctricos que desencadenan un latido, lo que las convirtió en un marcapasos natural.
Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista Science Transnational Medicine, después de haber monitoreado a los animales durante dos semanas. Según los científicos, la terapia génica podría ser la alternativa definitiva al marcapasos electrónico, que ocasiona problemas en muchos de los pacientes que lo utilizan.
Como el corazón de los cerdos es el más parecido al de los humanos en cuanto a anatomía, tamaño y peso, fue el elegido para los experimentos; aunque ahora que los resultados fueron exitosos se espera que la técnica sea probada en humanos en un plazo no mayor a tres años.