¿Te has cruzado ya por la calle con alguien llevando las Google Glass? Las «gafas del futuro» todavía no están a disposición de todo el mundo, pero los afortunados que las han podido probar hablan bastante bien del sorprendente dispositivo. Pero Google ha querido ir un paso más allá: con la nueva actualización para las Google Glass, será posible capturar imágenes con un simple guiño.
Google ha anunciado en su perfil de Google+ una actualización en el software de las gafas que dará incluso más funcionalidades al aparato. Los exploradores ya no tendrán que tocar las gafas ni dar instrucciones verbales: las Google Glass tomarán una foto cuando el usuario guiñe un ojo. Esto podría revolucionar nuestra manera de entender el hecho en sí de tomar fotos. Ya no se necesitan las manos, podemos registrar en un segundo cualquier cosa que pase por delante de nuestras pupilas. Y todo, literalmente, en un abrir y cerrar de ojos.
Este sorprendente rasgo de las Google Glass forma parte de la actualización XE12 del dispositivo, que incorpora otras muchas mejoras. Por ejemplo, en lo relativo a la seguridad, los chicos de Google se han esforzado para que el sistema de bloqueo de las gafas sea más fiable. El sistema permite bloquear y desbloquear las gafas con un código de leves toques en la parte táctil de las gafas.
Con la actualización XE12 los usuarios de las lentes de realidad aumentada también podrán subir vídeos que acaben de registrar directamente a Youtube. También se ha incorporado Hangouts a las Google Glass, y por ello será incluso más fácil permanecen en contacto con quien quieras, enviar mensajes y fotos de lo que estás viendo en ese preciso instante… La app para iOS es otra de las grandes novedades de la actualización. Por fin los usuarios de un dispositivo iOS podrán descargarse la aplicación MyGlass para sincronizar las gafas con su iPhone.
Todo parece indicar que las gafas de Google estarán disponibles para el mercado general a lo largo de 201. Lo cierto es que con estas novedades Google consigue despertar nuestra curiosidad por, si no comprar las Google Glass, al menos probarlas.