El tabaco y los cigarros en sus diferentes formas han estado presentes en la vida de las personas desde hace siglos. Sin embargo en los últimos años diversos estudios han puesto de manifiesto sus efectos nocivos para la salud. Por ese motivo entre otros nacieron los cigarros electrónicos, aunque quizá los ordenadores no estén a salvo de ellos.
Hace meses ya se debatió en Estados Unidos acerca de su «seguridad» para las personas, y ahora le toca el turno a la tecnología. La gran mayoría de cigarros electrónicos se cargan conectándolos a la red, aunque algunos cuentan con cargadores USB. Este hecho ha facilitado su carga a muchos fumadores, pero algunos han visto cómo sus ordenadores se infectaban «misteriosamente». Tras investigar y tratar de averiguar de dónde provenía la infección, en varios casos se determinó que los causantes eran los cargadores USB de unos cigarros electrónicos fabricados en China.
Aunque todavía no está confirmado completamente, es un hecho bastante factible en opinión de varios analistas. Esto es porque hace algunos años ya se produjeron varias infecciones mediante dispositivos con conexión USB. El malware y amenazas en general han evolucionado desde su creación y en muchas ocasiones no es necesario que el usuario lleve a cabo ninguna acción especial para que se activen.
Ante esa situación la medida a llevar a cabo para protegerse del posible malware de los cigarros electrónicos es sencilla. Cargarlos siempre que sea posible conectándolos a la red, evitando así las conexiones USB a los ordenadores.