La próxima misión espacial de la NASA tiene destino y fecha de lanzamiento, se trata de Marte y se prevé para el año 2020. El vehículo llevará consigo diversos instrumentos y uno de los proyectos que desarrollará a su arribo es el de producir oxígeno a partir del dióxido de carbono (CO2) que predomina en la atmósfera marciana.
La misión Marte 2020 considera el éxito de la nave Curiosity, que a casi 2 años de su aterrizaje en territorio marciano todavía se encuentra en operación y realizando algunas tareas.
En este caso el nuevo rover realizará una serie de investigaciones sin antecedente a partir de siete instrumentos, que fueron seleccionados de entre 58 propuestas de investigadores e ingenieros alrededor del mundo.
«La exploración de Marte será el legado de esta generación, y el rover Marte 2020 será otro paso crítico en el camino de los seres humanos al Planeta Rojo», dijo el administrador de la NASA, Charles Bolden y que reproduce el periódico 20minutos.es
El vehículo contará con hardware mucho más sofisticado y será capaz de realizar evaluaciones de tipo geológico del sitio de aterrizaje, análisis del potencial de hábitat del medio ambiente marciano, indagar vestigios de vida así como almacenar una colección de rocas y muestras de suelo, que serían enviadas a la tierra en una misión posterior, precisa la NASA.
Las tecnologías propuestas elegidas son dos cámaras (MastCam-Z y SuperCam) para la toma de fotografía y analizar la composición mineral y química de Marte, un espectómetro de fluorescencia de rayox X (PIXL), otro que utiliza luz ultravioleta de láser (SHERLOC), el MOXIE o investigación de exploración para la producción de oxígeno a partir del CO2 marciano; un analizador de la temperatura, velocidad, dirección del viento, presión, humedad y tamaño y forma del polvo (MEDA) y por último un radar para analizar la estructura geológica del subsuelo (RIMFAX) en hasta 1 centímetro de profundidad.