Si algo ha demostrado Microsoft es que cuando se propone un objetivo, difícilmente haya algo que pueda interponerse en su camino. Así lo ha demostrado con la intención de comprar Activision, y luego de 2 años, finalmente las cosas parecen estar más claras que nunca. Primero que nada, debemos estar conscientes de que la compra de esta empresa se centra principalmente en la adquisición de los derechos de Call of Duty o World of Warcraft, los dos grandes títulos de videojuegos desarrollados por esta empresa.
En este artículo analizaremos algunas de las claves más importantes involucradas en este acuerdo, el cual, ha mantenido a toda la comunidad atenta. El valor de Activision Blizzard se apuntó hace poco menos de 1 años en 68.7000 millones de dólares, pero la venta no ha sido posible materializarse debido ciertos aspectos involucrados, como por ejemplo, la regulación antimonopolio.
Dicho de otro modo, si Microsoft compara Activision, su nivel de dominio en la industria será muy superior a otras marca. La presencia de reguladores, como la FTC de estados Unidos o la CMA del Reino Unido, se encargan de evaluar estos casos para determinar si realmente es justo para el resto de los competidores del mercado. Pues luego de tanto drama, Microsoft ha avanzado hacia la aprobación de este acuerdo por parte de las autoridades.
Sin embargo, hay matices interesantes en este entorno, ya que, no podemos olvidar que Activision ha vendido los derechos de juegos a la empresa Ubisoft, en un acuerdo que ofrece los derechos a perpetuidad de estos juegos alojados en la nube que hayan sido desarrollados y publicados en los próximos 15 años. Esto se traduce como una imposibilidad para Microsoft de lanzar juegos exclusivamente en Xbox Cloud Gaming que sean de Activision Blizzard.
Entonces, ya los de Microsoft pueden dormir tranquilos, ya que, la empresa tiene carta abierta para llevar a cabo la compra, así que, sólo es cuestión de tiempo para que se haga oficial por parte de la empresa tecnológica.