El mundo tecnológico está lleno de productos que fracasaron antes incluso de ver la luz. La inmensa mayoría no los conoces y probablemente nunca escuchemos hablar de muchos de ellos, pero hay otros que sí. Es el caso del primer smartwatch de Facebook (rebautizada como Meta hace un año). Un reloj que sin llegar a ser oficial, apuntaba alto en cuanto a funcionalidades.
De este reloj inteligente llegamos incluso a conocer imágenes filtradas con su diseño, que tendría cámara y que su sistema estaría basado en Android. Aunque ahora ya nunca lo sabremos. O no al menos tan pronto como se esperaba, ya que informan desde Reuters que Meta ha paralizado todo el trabajo en este y otros proyectos de la compañía.
1.000 millones de dólares que se van por la ventana
Que Meta sea una de las empresas tecnológicas más grandes del mundo no evita que sus desarrollos sean (y presenten pérdidas) de millones. Incluso si son para meterse en un sector ya tan desarrollado como el de los relojes inteligentes. Así, hace más de un año filtraban que la compañía estaba invirtiendo mil millones de dólares en el desarrollo de su primer reloj inteligente.
La semana pasada se confirmaba que Meta había despedido a 11.000 personas. Más despidos incluso que los que Elon Musk efectuó en su recién adquirida Twitter. Según Reuters, la mitad de esos empleados que ya están fuera de Meta estaban en equipos orientados a desarrollar pantallas y relojes inteligentes.
Esto implica por tanto que también se paralizan otros dispositivos que Meta estuviese investigando. Aunque particularmente nos parece más llamativo el del reloj por aquello de haberse filtrado hace ya más de un año y por lo interesante que hubiese resultado este dispositivo en el actual panorama.
Cuál podría haber sido el impacto del smartwatch de Meta es algo que desconocemos y que, salvo que en algún momento se retome el desarrollo, nunca sabremos. Sin embargo, sobre el papel apuntaba cuanto menos a ser innovador. Véase como ejemplo su diseño con ‘notch’ en el que incluirían una cámara 1.080p.
También se decía que este reloj ni siquiera necesitaría de un móvil para funcionar, ya que su conectividad y sistema operativo le valdría para funcionar por sí mismo. No es que fuese a ser esto revolucionario viendo los smartwatch LTE que ya existen, pero se antojaría cuanto menos curioso, dado que puede que ni siquiera hiciese falta una app en el smartphone. Nunca lo sabremos.