Una noticia lamentable por parte de Microsoft podría anunciar el final del camino para Windows 7 dentro de unos pocos años. Después de la liberación de Windows 10, la compañía ha realizado cualquier cantidad de estrategias para atraer a los nuevos usuarios hacia su nuevo sistema operativo, aunque las reacciones no son las esperadas.
Aunque ya ha pasado un tiempo desde que Windows XP no ha recibido soportes por parte de Microsoft, aún la compañía tiene que cargar con el hecho de que existen una gran cantidad de usuarios que aún hacen uso de este sistema operativo. Esto podría generar una proyección directa hacia lo que podría pasar con respecto a su Windows 7, la cual es una de las versiones más estables de los sistemas operativos desarrollados por la compañía dirigida por Bill Gates.
Los clientes corporativos e institucionales, pueden pagar por la actualización extendida de seguridad hasta enero del 2023, lo que es igual a tres años después de que Microsoft ofrece sus patches regulares oficiales. Esto no solo es una noticia lamentable para los amantes de Windows 7, sino que también los precios aumentarán progresivamente entre el año 2020 y 2023, por lo que, mientras más las empresas utilizan este sistema operativo, más costoso se volverá.
La estabilidad y confiabilidad de Windows 7 ha permitido que los usuarios se mantengan firmes ante la renuencia a actualizar a Windows 10, un sistema operativo que aun muestra ciertas incompatibilidades con algunas aplicaciones. Windows 7 vio la luz en el año 2009, pero, tomando en cuenta que Microsoft culminó la compatibilidad para Windows XP en 2014, puede decirse que este sobreviviente tiene un final temprano.
Es por esto, que Microsoft ha tomado la medida de incentivar a sus usuarios a actualizarse antes de 2023. Muchos se encuentran renuentes a un actualizar Windows 10, pero el plan de Microsoft es aumentar las ventas de este sistema operativo.