Apenas el 20 de marzo se dio a conocer que Google encriptó su servicio de correo electrónico, Gmail (el más utilizado en todo el mundo), para protegerlo de los espionajes de instituciones como la Agencia Nacional de Inteligencia de Estados Unidos. No obstante ¿quién protege tu información de las mismas compañías de correo electrónico y otros servicios en la nube?
The Guardian, periódico inglés, le ha dado seguimiento al tema, y publicó recientemente un reportaje en el que retoma el caso de Alex Kibkalo, un periodista que supuestamente consiguió acceso al código fuente de Microsoft, y Outlook “se vio obligado” a espiar su cuenta de correo para comprobar si realmente su información estaba siendo comprometida.
Lo cierto es que en cuanto a servicios en la nube, es un secreto a voces que las empresas pueden ver tu información si les da la gana. Y el hecho está especificado por ahí, en algún lugar dentro de los términos y condiciones de los servicios de Yahoo, Outlook, Gmail y Apple; que pueden tener acceso a tus mensajes si consideran “de buena fe”, que tienen motivos para hacerlo.
El caso de Alex Kibkalo sólo es la punta de un iceberg donde la información de los cibernautas no está segura, ya no porque organismos como la NSA intenten acceder a ella, sin por el uso que las mismas empresas le den.
Ejemplos abundan, como la compra de WhatsApp por parte de Facebook por 19 mil millones de dólares, y un modelo de negocio por parte de la aplicación de mensajería que pone en tela de juicio que la adquisición sea rentable. Mark Zuckerberg hasta dijo que WhatsApp le salió “barato”, y es ahí cuando los focos de atención se encienden hacia la privacidad de los usuarios y la utilización de su información.
La gratuidad de los servicios en Internet nunca es legítima, y los usuarios siempre pagamos de una forma u otra por lo que nos ofrecen las empresas. Llámese Facebook, llámese Outlook, llámese Gmail o incluso Telegram, la privacidad en el fondo es el tema peligroso.
Tras el reportaje de The Guardian, bloggers como Michael Arrigton han compartido sus experiencias sobre la privacidad de las empresas. Arrigton publicó en su blog Uncrunched cómo Google entró hace unos años a su cuenta de Gmail para espiarlo tras publicar una historia sobre la empresa del buscador web.
Los casos siguen saliendo a la luz y la pregunta sigue en el aire: ¿qué protege mi privacidad en los servicios en la nube?