La próxima generación de computadoras Mac podría ya no incorporar procesadores fabricados por Intel, pues de acuerdo a reportes Apple comenzaría a fabricar los propios a partir de su chip A8 que utiliza en iPhones y iPads.
De confirmarse la noticia, el “divorcio” será algo más que una simple decisión de usar un procesador u otro. Intel lleva construyendo los procesadores para las Macs de Apple desde 2006, cuando se lanzó el primer modelo MacBook Pro.
El nombre del nuevo procesador de las computadoras de Apple sería A10X, y según lo que se sabe, estaría construido junto con Samsung. Los planes van más allá y se espera que la próxima MacBook Air de 12 pulgadas, cuyo presunto lanzamiento será en 2016, incorpore ya el nuevo microchip.
Con la potencia del actual chip A8 del iPhone, Apple se considera capaz de dar el siguiente paso y ser la creadora de sus propios microprocesadores para sus computadoras. Los chips Intel Core i quedarían de esta manera en el olvido, según reveló el analista de la firma KGI Securities, Ming Chi-Kuo.
Esta decisión ayudaría Apple a mantener el completo control sobre el lanzamiento de sus futuros productos, pues no dependería de Intel para esperar sus procesadores. Apple creó de forma autónoma los chips A previos al A8, en el que participó con Samsung. Quizá más adelante le convendría independizarse de la empresa surcoreana, su máxima competencia en telefonía móvil.