El mundo de los videojuegos es testigo de un nuevo cambio. Las adquisiciones de empresas por parte de otras también están presentes en él y con ellas siempre llegan novedades. Sony ha visto una oportunidad que no ha dejado pasar y ha comprado OnLive, el servicio de videojuegos en la nube.
OnLive era conocido por muchos usuarios al permitir jugar a videojuegos desde cualquier dispositivo. Contaba con su propia videoconsola, aunque la posibilidad de jugar desde ordenadores, móviles, tablets y televisiones lo hacía más interesante. El servicio costaba $9,99 mensuales y en 2012 llegó a alcanzar los 1,75 millones de usuarios.
El anuncio la ha realizado el propio OnLive en su página web. «Tras cinco años de servicio ininterrumpido, el servicio de videojuegos OnLive llega a su fin. Sony va a adquirir partes importantes de OnLive y entre sus planes no se encuentra continuar con el servicio en su forma actual. Su servicio se mantendrá hasta el 30 de abril de 2015. A partir de entonces no se realizarás más cargos por suscripciones, y hasta entonces podrá seguir jugando todos sus videojuegos. Como el primer servicio de streaming de este tipo, todos los que hayan jugado alguna vez usando OnLive han contribuido de algún modo a la tecnología y su desarrollo. Estamos tremendamente orgullosos de lo que se ha conseguido y extendemos de corazón nuestra gratitud a todos por ser parte del servicio de videojuegos en la nube OnLive«.
Con este emotivo comunicado, OnLive se despide del público. Hubo un tiempo en el que se le consideró una de las plataformas más prometedoras, sin embargo no ha podido competir con los grandes. En enero de este año Sony lanzó su plataforma de videojuegos en streaming PlayStation Now, y posiblemente haya influido a la hora de realizar la compra. La afirmación de que «entre sus planes no se encuentra continuar con el servicio en su forma actual» hace pensar cuáles habrán sido sus motivos. ¿Habrá querido deshacerse de un posible buen competidor? ¿Querrá utilizar esta tecnología en su propio beneficio? Sea cual sea, en cualquier caso el debate está servido.