SpaceX, la empresa de transporte aeroespacial fundada por Elon Musk, se acaba de anotar otro logro la madrugada de este viernes con el exitoso lanzamiento y aterrizaje de un cohete no tripulado transportando un satélite de comunicaciones.
Se trata del segundo aterrizaje exitoso sobre una plataforma marina de un cohete Falcon 9 por parte de SpaceX, luego de haberlo logrado por primera vez el pasado mes de abril, tras cuatro intentos fallidos. Otro cohete Falcon había aterrizado sobre una plataforma en tierra en Cabo Cañaveral en diciembre pasado.
En esta ocasión, el Falcon 9 despegó a las 01H21 (05H21 GMT) desde Cabo Cañaveral para poner en órbita al satélite de comunicaciones japonés, SKY perfect JSAT-14, mismo que fue entregado 32 minutos después, según informó la compañía.
Landing confirmed. Second stage continuing to carry JCSAT-14 to a Geosynchronous Transfer Orbit. pic.twitter.com/HfHI5cwoYX
— SpaceX (@SpaceX) May 6, 2016
Debido a la elevada altitud que se necesitaba para esta misión, SpaceX no esperaba un aterrizaje exitoso pues en el pasado la compañía había enfrentado problemas con el Falcon, ya que luego de poner el satélite en órbita el cohete regresaba a la atmósfera a gran velocidad, dificultando el frenado. Pero finalmente el aterrizaje fue perfecto.
Una transmisión en vivo a mostró al propulsor cayendo verticalmente sobre una sobre una plataforma en el Océano Atlántico, frente a las costas del estado de Florida. «Puede que necesite aumentar el tamaño del hangar de los cohetes», bromeó Musk en su cuenta de Twitter tras el aterrizaje.
Launch trajectory of Japanese commercial satellite JCSat-14, enroute to 36,000 km above Earth pic.twitter.com/QHiiMdMMJ3
— Elon Musk (@elonmusk) May 6, 2016
El cohete que lanzado el viernes viajó al doble de la velocidad del que logró aterrizar el mes pasado, y cumplió con la entrega del satélite en una órbita final de 36,000 km, es decir, unos 32,200 km más allá de la Estación Espacial Internacional, que se ubica a unos 400 kilómetros de la Tierra.
En los próximos meses la compañía estará esforzándose por perfeccionar esta técnica de aterrizaje de cohetes impulsores, para poder reutilizar las partes de los cohetes en vez de dejarlas caer en el mar cada vez que se realiza un lanzamiento. Se espera que el cohete que aterrizó este viernes vuelva a ser utilizado en junio.