La compañía de Redmond ha anunciado que Steve Ballmer dejará su puesto de Consejero Delegado. En dicho comunicado, se afirma que Steve Ballmer ha tomado la decisión de dejar el puesto que ocupa, y que continuará con sus funciones durante un plazo no superior a doce meses, mientras se elige a su sucesor.
El proceso de selección queda encomendado a un Comité dirigido por John Thompson y que incluirá también al presidente del consejo, y fundador de la empresa, Bill Gates, junto a los directivos Chuck Noski y Steve Luczo. Contarán con la colaboración de la consultora Heidrick & Struggles International Inc., especializada en la selección de directivos de alto nivel.
Según afirma Ballmer, Microsoft está en plena transición, pasando de la era PC a convertirse en una empresa centrada en dispositivos y servicios. Esta transición, según Ballmer, no estará completa para el momento en que tenía pensado jubilarse, y por tanto entiende que es mejor que tome las riendas alguien que pueda completar el proceso hasta el final.
John Thompson, por su parte, ha expresado su confianza en la capacidad del Comité de seleccionar un nuevo Consejero Delegado que, junto al equipo directivo, guíe el liderazgo de Microsoft en un mercado altamente competitivo.
El propio Bill Gates se ha congratulado de contar con Steve Ballmer durante este periodo de selección y ha expresado su disposición a trabajar en el Comité de selección con el objetivo de encontrar un excelente candidato para el puesto de Consejero Delegado.
Steve Ballmer lleva en Microsoft desde su fichaje en 1980, donde desempeñó diversas funciones hasta su nombramiento como Consejero Delegado en el año 2000. Los primeros comentarios en las redes atribuyen este cambio de dirección al fracaso de Windows 8 y a las bajas cuotas de mercado que tiene Microsoft en los segmentos de Smartphone y tabletas, pese a la considerable inversión que ha hecho.