Instagram, la más popular red social de difusión de imágenes, empezará a insertar publicidad en las fotos de los usuarios dentro de dos meses. A través de su blog oficial, los desarrolladores de la aplicación han hecho público que el objetivo es hacer de Instagram una aplicación “sostenible”.
Sin embargo, el cambio será gradual: los usuarios de Estados Unidos serán los primeros en encontrar anuncios entre sus fotos, y además la inserción de los mismos será progresiva.
La aplicación, que fue comprada el año pasado por Facebook y que desde entonces ha disparado su repercusión, permitirá esconder los anuncios que no resulten interesantes al usuario o incluso enviar comentarios comunicando a los gestores qué contenido queremos o no queremos encontrar entre nuestras fotos.
Pero esta no es la primera red social en monetizar de alguna manera el contenido de sus usuarios, y de hecho los social media se han convertido en un marco excepcional para la inserción de publicidad. Según eMarketer, se espera que los anunciantes inviertan unos 10.000 millones de dólares en las redes sociales, y parece que Instagram con sus 150 millones de usuarios es un objetivo apetecible.
Instagram ya ha reconocido que esta novedad podría no contar con el entusiasmo de sus usuarios, pero consideran este cambio como algo importante dentro de las muchas “grandes ideas” que tienen para el futuro.
¿Qué opinarán los usuarios?
¿Estarán satisfechos con el contenido publicitario siempre que sea para mejorar el rendimiento de la aplicación?