En las últimas horas, se ha revelado un informe en el que se afirma que los collares anti 5G son radioactivos y pueden generar un serio impacto negativo en la salud de quien los lleva. Estos dispositivos comenzaron a venderse con la intención de proteger a las personas de los aparentes daños que pueden generar las ondas de la plataforma 5G presentada en 2019.
Pero este es uno de los casos en los que la solución puede generar peores consecuencias que el problema inicial. Estos collares se supone que incorporan iones negativos, los cuales ayudan a contrarrestar el impacto que los creyentes de esta teoría produce la nueva plataforma de conectividad inalámbrica.
Desde mediados del 2020 surgieron algunos conspiracionistas que aseguraban que el COVID-19 tenía que ver con las redes 5G, y aunque hasta el momento no se ha demostrado nada sólido, estos collares parecían ser la solución para muchos.
Las autoridades holandesas han alertado acerca de los resultados obtenidos luego de la realización de algunas pruebas que no ofrecen resultados nada alentadores. Los índices de radioactividad podrían llegar a ser tales, que el daño en tejidos y el ADN podría ser irreversible.
Es posible que estos mismos conspiracionistas levanten su mano para decir que esto es parte del engaño, pero más vale ser precavidos. La información llega directamente de la Autoridad de Seguridad Nuclear y protección Radiológica de Países Bajos; una fuente bastante sólida, sin duda.
Asimismo, el gobierno exhortó a la población a dejar de usar estos dispositivos que contenían un alto índice de radioactividad. Son un total de 10 productos que conforman la lista negra, y entre ellos destacan collares, pulseras y máscaras para dormir.
Los expertos aseguran que esa radiación ionizante puede dañar el tejido de la piel. El uso continuo de estos productos incrementa el riesgo, por lo que, las autoridades holandesas han ordenado que se detenga la comercialización de los mismos.