Huawei – Aumenta la crisis tras cese de relaciones con ARM

El oxígeno parece hacerse cada vez menor en la compañía china Huawei, quienes han tenido que enfrentar uno de los momentos más críticos de su historia. Después de que Donald Trump aprobara el veto a la marca en los Estados Unidos, una serie de eventos desafortunados han venido desarrollándose, generándose el cese de relaciones con diferentes marcas.

Sin duda alguna, uno de los golpes más fuertes ha sido el rompimiento de vínculos con Google, ya que, esto afectaba significativamente la operatividad desde el punto de vista de software, pero ahora, luego del pronunciamiento de marcas como Intel y Qualcomm, las cosas se han puesto mucho más difíciles en la compañía asiática.

Las condiciones de este veto estaban vinculadas al cese de relaciones con esta compañía china, la cual debía romper cualquier nexo con empresas norteamericanas. Ahora, se suma a esta lista el fabricante de semiconductores ARM, quienes ya no colaborarán con la compañía asiática.

Esto perjudica enormemente la manufactura de estos dispositivos móviles, ya que, esta empresa especializada en la producción de semiconductores con sede en el Reino Unido, ha terminado sus relaciones con la marca asiática, lo que afecta directamente el acceso a sus microprocesadores. Los dispositivos desarrollados por Huawei cuentan con un procesadores HiSilicon Kirin, los cuales son desarrollados por la marca ARM.

Luego de que la marca llevara a su personal activo a detener todos los contratos existentes con la marca, dejan a Huawei sin demasiadas opciones, optando únicamente por aquellas que ofrecen acceso gratuito. El rompimiento de estas relaciones está vinculado estrictamente a la protección de los vínculos existentes con las relaciones con Estados Unidos, ya que, tras las regulaciones establecidas por Donald Trump, ARM ha decidido evitar cualquier responsabilidad.

Desde el punto de vista objetivo, este golpe que le ha dado la compañía ARM a Huawei es mucho más grave y delicado de lo que pudo haber representado la decisión de Google, ya que, a pesar de haber confirmado que estaba desarrollando un sistema operativo alternativo a Android, será difícil encontrar la tecnología proporcionada por ARM en otra opción rápida.